Cruzate de mi lado,
cambiá de vereda
y subite a mi  tren



Dejame acá!


Hay una sombra para cada luz
  

(corras a donde corras)






Salvamos al mundo esa noche!



Rendido, me senté frente a vos y sonreímos








    
¡Qué vengan de a mil!

Lo bueno se va volando y yo me quiero matar.



               



Nunca dormí tan poco, tal vez viva demasiado.


 Me acuerdo que abrí la puerta y eras vos, después me perdí.